"Una corona grande puede llevarse sobre una cabeza hueca; pero una cabeza grande puede sobreponerse a una corona". María Domínguez Remón
La vida de esta mujer de origen humilde es una historia de superación contra corriente. Fue fusilada en 1936, a la edad de 54 años en la localidad de Fuendejalón. Unos años de atrás, llegó a dirigir una escuela en el Valle de Baztán (Navarra). Además de llegar a desempeñar la alcaldía en Gallur fue también poeta, conferenciante y periodista, fue en el diario El País donde hizo sus primeras armas.
"Casada con Bonifacio Ba Cercé a los 18 años y pronto separada, empezó a ejercer como maestra, aun sin tener el título, en el caserío Mendiola, del Valle de Baztán (Navarra) en algún pueblo distante a unos 4 kilómetros de Almándoz, recorrido que transitaba 4 veces al día [01]. Ingresa en la escuela normal de Pamplona, compatibilizando sus estudios con su propia labor docente, pero, por prescripción facultativa, debe abandonar la montaña y marchar a Zaragoza, donde se matricula en el turno nocturno de la Escuela de Artes y Oficios. Mientras se gana el sustento haciendo medias a máquina. A partir de 1916, empieza a publicar en el periódico republicano Ideal de Aragón. En 1934 se convirtió en la primera mujer alcaldesa del Estado Español, en la localidad de Gallur.
En septiembre de 1936 es fusilada en Fuendejalón unos días después de haber sido asesinado en Tabuenca (Zaragoza) su segundo marido, Arturo Romanos, también militante socialista y vecino de Gallur. [ver enciclopedia Aragonesa]"
Cuenta con una calle y una escuela dedicada en Gallur. También cuenta con una calle en Nuevo Artica, pueblo de la cuenca de Pamplona. Ver mapa de la calle María Domínguez Remón.
Puedes escuchar un Programa de Onda Cero con su biografía.
Transcribimos íntegramente una noticia de David Salvador en "Aragón digital" sobre su biografía y aportaciones a los valores republicanos y feministas.
La aragonesa María Domínguez, mucho más que la primera mujer alcaldesa en España
Quizá el nombre no sea tan conocido pero forma parte de la historia democrática de España. A principios de siglo, luchó por emancipar a la mujer, ilustrar a la población rural y por un futuro más justo. Tanto reivindicó que Franco, al principio de la dictadura, la silenció para siempre. Por cierto, María era aragonesa, de la Ribera Alta.